Ernest y Célestine
- Reportero Clúster Ideas
- 31 mar 2020
- 2 Min. de lectura
Imaginemos a un ratoncito y un gran oso viviendo juntos bajo el mismo techo, siendo amigos y que cada uno quiera hacer lo que le gusta. Imaginemos que eso jamás debe ocurrir y que sería absurdo si sucediera ya que los ratones deben vivir bajo tierra y los osos en la superficie. Bueno, eso parece poco importante para Stéphane Aubier, Vincent Patar y Benjamin Renner, directores de la película franco-belga Ernest y Célestine.
Basada en la serie de libros infantiles del mismo nombre de la autora e ilustradora belga, Gabrielle Vincent, cuenta la historia de amistad y valor de una ratoncita, Célestine, quién parece tener cierto gusto por el arte, y un oso algo torpe y mal humorado, Ernest, cuya aspiración es la música. Ambos, con el objetivo en común de ser lo que quieren y no lo que esperan de ellos, cuidarán de su amistad sin importar si van en contra del orden establecido.
Contando con una animación que imita a la acuarela, nos da un respiro de algunas productoras como Pixar, DreamWorks y Disney y que a pesar de ser tan suave y ligera, no deja de mostrar ambientes poco agradables y sombríos como lo es el mundo subterráneo en el que vive Célestine. Con una banda sonora típica de lo que conocemos como música francesa, agradable y que absorbe la esencia de cada escena.
Una película agradable para los adultos y divertida para los niños. Con una historia que enseña sin rodeos a nuevas generaciones la importancia de escoger para el futuro lo que quieran, la importancia de la amistad y que no siempre deben ser los osos arriba y los ratones abajo.
Invitada: Paula aula Alejandra Sánchez Salcedo
Comments